TripleTrans

sábado, noviembre 26, 2005

Conversación de los libres derechos



CONSTANZA: ¿Qué era lo que me decías de los hombres bonitos?

LIBERTAD: Que yo si no es un hombre bonito no me acuesto. Tiene que ser un hombre que se depile, que se maquille, que use tacos altos. Que haga exhibicionismo. Aeromodelismo. Y erotismo. Aladeltismo. Si no se tira de una montaña yo no lo quiero.

CONSTANZA: Pero acá no hay montañas.

LIBERTAD: Tiene que ser una persona poderosa. Si no es poderosa y bella yo no la quiero. Llevame en helicóptero y me bajás allá en el Corcovado. Desde ahí nos tiramos.

CONSTANZA: ¿Desde el Cristo?

LIBERTAD: Claro. El Cristo Corcovado es chico. Pero igual.

CONSTANZA: ¿Con caipiriña o sin caipiriña?

LIBERTAD: Con todo. Nos vamos a los morros a darnos con un poco de drogadicción. Para poder estar en onda. A mi me gustaban los morros, cuando por ejemplo, estaba aquello de Michael Jackson, que fue a bailar en las façendas y las façcendiñas. No, era en las chabolas. ¿Cuál es la palabra? ¿Como se les dice? ¿”Chabelas Vargas”?

CONSTANZA. Digamos gente de delinquir, de delinquimiento.

LIBERTAD: Porque hay que decir la verdad, esa gente está para delinquir.

CONSTANZA: Y... viven de eso.

LIBERTAD: Que otra cosa se les puede decir.

CONSTANZA: No podés entrar a esos barrios. No.

LIBERTAD: Entras si sos conocida del “Cosita”, del “Rambo”, del “Pelado” o del “Vaina maluca”. Sino no entrás. No es como acá que vos vas en un taxi y entrás al “Borro”. Entrás y salís. A la calle “Libia”.

CONSTANZA: Si vas al Borro ¿yo puedo acompañarte?

LIBERTAD: Vamos. Vamos.

CONSTANZA: Pensándolo mejor... no. Porque nos cagan a palos.

LIBERTAD: No seas prejuiciosa. Mejor no vayas con miedo, sino siempre te va a pasar eso.

CONSTANZA: Me estás diciendo como que te conocen en el Borro, pero yo estoy segura que ahí no te conocen y que ahí te van a castrar.

LIBERTAD: Yo me hago amiga.

CONSTANZA: ¿En el momento?

LIBERTAD: Llevamos comida y vino. La gente te adora si le llevas un kilo de harina. Vamos con una canasta familiar. Son sólo cien pesos.

CONSTANZA: ¿Con cien pesos ya estamos en el Borro?

LIBERTAD: Y un kilo de harina. ¡Una maravilla! ¡La última moda en turismo aventura!

CONSTANZA: Bueno, ya se te grabó la porno. Este actor, Tony Donovan, es un chico muy lindo, pero acá tiene pareja.

LIBERTAD: A no, típica pareja heterosexual ¿Qué es esto? Seguimos con el mismo modelo. Este modelo ya caducó. Si querés vamos a la antigua Roma o Grecia, pero terminemos con el concepto de pareja.

CONSTANZA: Pero en la antigua Roma era la familia patriarcal y habían muchos hijos.

LIBERTAD: Pero se encargaban de todos ellos. Y eran los esclavos los homosexuales. Y había templos. Y que no se entere Diana Mines que nos hace juicio. Mirá Fossati que vio a los jugadores del seleccionado haciéndose sexo oral. Que si están concentrados no pueden estar haciendo sexo, se supone. Los cánones del sistema están hechos como de una familia amorosa y eso no es así, no existe ese concepto. Volvamos a lo antiguo, ya tuvimos dos mil años de hostigamiento.

PD: Conversación de dos Diputadas por el Sexo Libre en la Iniciativa de la Liberación Hetero-Homo Sexual del Partido Comuna-Libre del Parlamento Interregional de América Latina, realizado en Río de Janeiro en enero del 2005.-

sábado, noviembre 19, 2005

Primer Amor (historia de una travesti, o lo que mierda sea – sean humanos ¡che!)


Para los que no han leído mi otro relato, me presentare, mi nombre es Johanna, mido 1.82 mts, peso 65 kg, mi cuerpo esta bien trabajado. Lo que más me gusta de éste son mis pechos, mi hemi-pene, la serpiente kundalini, que nace en la rabadilla alojada en la base de mi columna vertebral y el chancro que tengo en el paladar. Soy un poco corto de vista, o sea ciego. Tomo medicación para mi sistema extra-piramidal. Soy medio morocha, pero comúnmente por la calle me gritan “negra”; aclaremos que a lo Naomi Campbell, como las sopas Campbell. Tengo un ojo de vidrio y el sano es de un azul cobalto que si lo mirás te enamorás. Mi color de piel quedó trigueña por los baños de sol que me di para curarme los hongos en la piel. Mi vagina-verga mide en su mejor momento 26 cm, y de profundidad 15, así que busco parejas poco dotadas porque donde sea muy grande me explotan toda por dentro. Y no quiero quedar internada de nuevo por mala praxis. Doy gracias al Dr. Caritá y a Cunas Uruguayas por los bonos colaboración que hicieron posible mi intervención reparadora de genitales. Soy el único caso en el mundo que tiene los dos sexos, de la forma en que los tengo yo. Ah... soy trisexual.


Esta historia es de cuando tenia 430 años, en los comienzos de mi vida, sexual. Porque es a esa edad que empezás a tener sexo en serio. Aclaremos que lo de los burdeles de Cuba, en la época de Batista, no cuenta. Y lo del sexo oral a los batallones de revolucionarios cubanos que rechazaron la invasión imperialista en Bahía de Cochinos, tampoco es cierto. Esta historia pasó en la época del colegio, durante la ocupación del Liceo Miranda. Ahí nos hacían sacar los uniformes. Nos veíamos todos desnudos. Y mis compañeros percibían que yo poseía los dos sexos. Me sentía muy mal cuando todos escapaban horrorizados de mí.... Y las risas. Las risas todavía resuenan en mis noches de sueño. Yo tuve un sueño, como Gandhi, como Malcom X, Steve Martín y Nacha Guevara o Rigoberta Menchú. Soñé tener unas piernas como las de Ronaldo. Cortármelas y cobrar el seguro. Yo solía viajar en un bus, camino hacia mi casa, esta era la época de las hormonas alborotadas. Y, aunque ya había tenido sexo, cuando veía a un hombre / mujer / travesti / transgénica, o sea, hermana afrodita, lo primero que le miraba era si tenía todos los dientes, si sabía hablar, si era limpio (si tenía las manos sucias no encaraba, si tenía olor a patas menos), si se depilaba, porque sino yo no me acostaba, la cara, el culo y por ultimo tenía especial cuidado con el tamaño de su órgano. No fuese a destruirme los genitales de nuevo. Tenia que tener “paquetito”. ¡¡Estoy podrída!!


La verdad es que soy un poco exigente. Pero a la historia. En el bus, había un ayudante, que la primera vez que lo vi, pues no me llamo mucho la atención. Pero con el pasar de los días lo miraba con más detenimiento, porque me parecía pobre, porque tenía aspecto de pobre. Y la verdad, era pobre, porque después lo supe a ciencia cierta, se lo pregunté. No era muy alto, más o menos 1,65 mts, mas bien enano. Era de rasgos un poco bruscos y brujos, o sea... un chongo. Pero la verdad tenia una cara linda, con una nariz perfecta. Lo segundo era su culo, que con la ropa que usaba se veía redondo, apretadito y delicioso, no usaba slip y esto era lo que más me atraía de él. Por ultimo su paquete, que no se veía grande, pero tampoco pequeño. Creo que trabajaba como chofer de Federal Express (envíos a todo el mundo). La verdad, él parecía tener como 13 años, así que era normal que no se le notara mucho el paquete.


La cosa, era que cuando pensaba en él, se me paraba la verga, que en ese tiempo media como 18 cm, y 5 cm de profundidad. Ya sé que a veces me pongo insoportable con el metraje del paquete [¿Todavía no te llegó el paquete de Federal? ¿Qué anda pasando? ¿Qué hora es? ¿Hay leche? ¿Sale una? ¿A ver eso? No te me tires encima, que tengo la leche fresca, en esta copa]. Cuando me iba a bajar del bus mis genitales hinchados me ponían en una situación incomoda. Con el pasar de los días, mis miradas se iban volviendo un poco más descaradas, hasta el punto en que él creo que se dio cuenta, pero contrario a lo que yo pensaba él fue quien me siguió mirando. Yo le seguía el juego. Lo mejor sucedió un día en el cual el bus iba lleno con un montón de gente indigente que nos miraba y desfilaba. Yo me tenia que bajar, y como de costumbre iba parado, estaba por bajarme y él se encontraba en la puerta del bus. Como tocaba pasar rozando a todo el mundo aproveche la ocasión para sentir ese culito con mi verga-vagina, cosa que a mi me gusto mucho y, al parecer, a él también.


A mí siempre me gustó andar en funiculares, así que al día siguiente inicié una conversación y lo invité a dar un paseo en uno. Lo encaré con una pregunta un poco boba, pero dio resultado: “¿Qué anda pasando? ¿Qué hora es? ¿Hay leche? ¿Sale una? ¿A ver eso?”. Cosa que él respondió nerviosamente con un escupitajo en medio de mi jeta. Yo me aproveché y le zampé un beso de lengua, onda francés que son más profundos y sucios. Luego le hice la invitación al paseo de los “Treinta y Tres” (porque ahí hay levante todo el tiempo y tenía que levantar un préstamo en la Caja Nacional). Primero me llevó a comer un panchito, y a tomar un chopp en la Paponita. Pasamos divinamente comiendo una copa helada con waffles, chantilly, cerezas y chocolate en rama (bien de puto). Hablamos de todo, pusimos el corazón sobre la mesa ya que esos manjares eran como nuestras propias vidas. Porque uno es lo que come. Si me comés un panchito sos un goloso. Si me comés un glicin sos bailarín. Después tomamos un café con cognac y un cigarillo Ives Saint Laureant. Cuando quisimos acordar eran las dos de la mañana. Y nos fuimos a Cain. Esto puedo considerarlo un encuentro trisexual del primer tipo.


Al otro día viajábamos a kilómetros de altura camino al Mont Blanc en Suiza, comiendo la manjares tradicionales suizos, recubiertos de chocolate fundido. Los dos jugábamos con nuestras extensiones, nuestros órganos y unos souvenirs graciosísimos, que eran unas réplicas exactas de unas coronitas del Imperio Suizo. Yo me senté en una ventana y, puesto que el asiento de al lado estaba desocupado, él se dispuso en éste... dando comienzo a la lecheada.


Ahí me entere de su nombre. Se llamaba Jacinto Pichimauido y tenia 15 años (así que mis cálculos no estaban tan mal). Le pregunté si había visto “Los Enredos de Wanda” y me dijo que si. Con eso me enamoré. Yo le canté la primera mitad del himno francés y él me cantó la segunda. Me dijo que estudiaba por las mañanas y que por la tarde trabajaba de taxi-boy para hacer unos pesos extra. Era justo lo que yo necesitaba. Le propuse alquilarlo de cobayo para mis experimentos en el laboratorio Androginia SRL. Le pregunte si era virgen, él respondió que no. Hasta ahí quedo la conversación, pero al bajarme le pregunte si algún día le gustaría ir a mi cama de agua, yo soy alérgica a los colchones, y al agua. Él dijo que claro, que solo dijera cuando. Pero antes de por mi cama, experimentaría con él. Y así fue.


Después de una semana, todo estaba listo para implantarle pedacitos de cable en las meninges. Era una forma de divertirse sanamente para evitar pasarnos toda la noche hablando, jugando y viendo películas. Él resistió la prueba con éxito. Se tuvo que maquillar como RuPaul y cantar media canción “Viva la vida, viva el amor”. Así se ejecuto mi plan, claro que yo tenía varios ya que siempre planifico por adelantado.


Más tarde, hicimos una fiesta para elegir a Mr/Miss Clon 2005 y le presente a mis padres y a mi hermana. Le enseñe toda la casa. Tomamos un copetín. Mamá incorporó dos veces y tuvo una visión apocalíptica. Después entramos todos en trance, simulando el andar de los patos cuando emigran hacia el sur. Todo eso en mi cuarto. Pero yo no le dije que íbamos a pasar la noche ahí, y él lo aceptó sin más. Justo como las 3 de la tarde hicimos el nuevo implante de clones, pero mis padres se asustaron por lo crudo de la maniobra y me dijeron que se escapaban para el aguantadero en la casa de Tierra Caliente. Tenían que proteger el último negocio de la familia. Yo les dije que no podía fallar en esto. Que había hecho un Master en el Politécnico de Bostón. Y, además, Jacinto tenia que llegar temprano a su casa, al día siguiente. Así que mi papá accedió a que nos quedáramos solos.


Todos se fueron. Hacía un calor terrible, así que puse el aire acondicionado al máximo y preparé a Jacinto para lo que le esperaba. Le quite la camiseta, y para que no sintiera temor le pregunté: “¿qué anda pasando? ¿viste Los Pájaros de Hitchcok? Pajarón! Pajuerato! Pajarillo mío. Mostrame el pajarito que lo voy a alimentar”. Saqué el instrumental y le hice un tajo desde el abdomen hasta el pecho, él me miro y se sonrojo. Me dijo que le daba un poco de pena, yo le dije que no fuera bobo que era un experimento, entonces no habría problema. Más tarde me confesó que en su casa no había recibido cariño.


Su piel quedó de un color violáceo por la perdida de sangre. Pero no se sintió un grito. Yo pensé si sería humano o no. Con eso vi la posibilidad de un negocio. Tomé mi celular y llame a la trata de órganos. Pedí para hablar con el director. Dije: “Hola Dr. Zucovich”. Del otro lado me respondieron: “Habla el Dr. Cocoita”. Yo le mencioné que tenía dos riñones, un higado, un corazón sin dolor, dos ojos sin mancillar por las lágrimas, una próstata sin masajear a todo dar y un prestamo recién hecho de 40 mil dólares. Así que podíamos abrir nuestra propia clínica. Yo quería que se lo comunicara al Dr. Zucovich ya que este me debía muchos favores. Le aclaré que si no salía el trato yo abría la boca y denunciaba los casos de transplantes con gente del Barrio Capra, Carlo Magno y Bola de Nieve. Esto estaba a todo dar. Siempre hay tiempo para un buen bussiness. Si lo sabré yo que me mudé de la Comercial al Barrio de los Judios.

Pero el amor plantea sorpresas.


Al mirar a Jacinto su color de piel, sus tetillas que provocaba coger a mordiscos, y por ultimo y a pesar de su corta edad el vello en todo su torso, cosa que me excito mucho más, tuve que pensarlo dos veces. Más cuando me dijo: “Te amo y te necesito”. Creo que en ese momento me quede mirándolo, con una cara de deseo, que él pareció darse cuenta, y lo único que hizo fue darme la espalda.


De repente escuché las voces de mi Papá al pegarme, las voces esquizofrénicas de mi Padre. Tomé dos pastillas de Prozac y el Zomit. Me cayeron tan mal que agarré el bisturí y arremetí contra mi papi. Comencé a cortar sin clemencia. Yo soy una persona roja, a mi me gusta el color rojo. Por supuesto que después me hice un churrasco a la plancha, como en “Tomates Verdes Fritos” que ahí comen gente, que es lo de lo más rico que puede haber. Especialmente la gente negra, que tiene el sabor dulce de la vida. Y mi papá era negro (pero yo había salido blanca, blanca, nunca supe porqué) y Jacinto también. Fue en ese momento que me cerro todo, así que también me lo comí y lo que sobró lo puse en el freezer para que me durara. Mi dulce amor. Cuanta excitación.


Toda esta adrenalina me hizo arder en llamas. Con el mismo bisturí con el que los masacré, me corté un cachito de piel y bebí de mi sangre. Me sentí complacida sexualmente. Llegué al éxtasis. Después me puse a mirar un poco la tele y a hablar conmigo misma un poco de cosas que no tenían nada que ver.


Ya bien entrada la noche, puse el CD de “Psicosis” y comencé a cantar la canción de dicha película: “Screaming”. No tenia sueño, así que mientras estaba cambiando de canales (y con toda la intención del mundo) puse una película xxx. Todo iba normal en la película, se trataba de un grupo de amigos, que habían viajado a Sex City, a pasar las vacaciones, pero lo único que hicieron fue tener un montón de sexo salvaje y desenfrenado donde se iban matando uno por uno. Después de acostarse con uno, lo mataban. Si no contaba un chiste lo mataban, y si no se reían, peor. Todos los chicos estaban buenísimos, todos rubios, de ojos azules, cuerpo bien trabajado, y con unas vergas que cualquiera desearía poder chupar, ha... y se me olvidaba con unos culitos, redonditos y sin un solo pelo. Y todos terminaron muertos a pesar de lo lindos que eran. Una lástima porque ninguno se contó un chiste. Todo fue la culpa de Tatiana, la Serial Travesti, buscada como enemiga pública número uno en el estado de Georgia en la URSS, que los había convencido de tomar cocaína rusa, pura y haschis ruso, que es muy fuerte porque está hecho con girasol puro. ¡Con razón se mataban durante el orgasmo!


En una escena, aparecía un negro de la isla de Arcángel. Con una verga de 30 cm. Bien gruesa era. A él también lo mataron. Tatiana le ofreció un panchito y en un acto de clemencia le propuso escaparse juntos. Pero el negro se negó porque había sufrido mucho la esclavitud. No olvidemos que Rusia es La Carcel de los Pueblos. Todos lo que entraban los mataban. Esto desde Ivan el Terrible hasta Stalin. Fue así. Stalin mato 20 millones por lo menos. En un día, Ivan mató cien mil en Novogorod. Todos empaladas. ¡Y se quejan de tres mujeres que mataron acá en Montevideo! ¡Y a una la dejaron con vida! ¡Quiere decir que acá no hay asesinos profesionales!
A cierta altura me sentí hiperventilada. Y pensé: “Que sola estoy, pero soy feliz”. Todos los chicos se disputaban la verga negra. Esto me excito, ver a un negro con cuatro blancos al mismo tiempo chupandole la verga. Y cortándolo en pedacitos. Él tuvo sus quince minutos de fama, pero sus trozos fueron esparcidos por toda la habitación formando una estrella comunista de cinco puntas. Negra. La disposición era una vela, carne, una vela, carne. Había un dejo a Uganda.


Terminé de ver la película, me tomé otro saque de Prozac pero con cocaina. Me puse el atuendo de cuero negro y quedé lista para ir a Ibiza. En la puerta me esperaba mi amiga La Giuliana disfrazada de Princesa María Leia. Y como el tachero que me llevaba al bailongo no me dejó que le pagara chupandole la pistola, también lo maté. De un tiro en las pelotas.


Yo ahora estoy en las Bahamas disputándome la isla que se compró la negra conductora de programas televisivos yanquies Opra. A otra que se la tengo jurada es a Manila Holland, mujer peligro amiga de las TripleTrans. Yo a ellas las quiero muchas, las respeto, les tengo miedo ¡Por favor! ¡Contra ellas nada que las adoro! Pero la Manila me sacó los negocios con la mafia china y sólo me quedó el bussines con las mujeres del Islam. Lo que ellas no saben, es que yo estoy a punto de concretar un negocio con la manipulación genética y con esto voy a remontar. Voy a ser la nueva Dra. De Méngüele de Minogue.

Y como dice la historia a cada cual le llega su hora.

Te quiero mucho Jacinto, que me cambiaste la vida.

miércoles, noviembre 16, 2005

REUNION DEL CONDOMINIO DE LA GONOLOCA

MISS GIULIANA EN EL FESTIVAL ITALIANO FINALISSIMA DE 1974


Martín, Marcos y Maycol eran amigos desde hacía 10 meses. Se encontraban en la casa de éste último, como todos los sábados, junto con otros dos chicos: Anibalito y Andrésito dos adolescentes precoces, estudiantes de Escuela Horizonte Para No Perder El Rumbo. Consiguieron amigarse gracias a las peñas organizadas por la Fundación Manantiales. Los tres eran amigos del barrio Cirilo (él que te cogió con un hilo dental pero con delantal), todo gracias a Giuliana -antes Candela, hoy Romina Belén- la novia de Martín, que era amiga de Marcos, pero que fue pareja transitoria de Maycol el verano pasado en Aguas Dulces.
Sin embargo, hacía un tiempo que su amistad se había transformado en una pesadilla constante. Era una guerra cotidiana de peleas sin sentido y disgustos. Se drogaban, alcoholizaban un poco y comenzaban a pelearse por Giuliana, buscando que se pusiera los calzones rojos y la peluca rubia fluo que había usado en el espectáculo callejero Quereme Y No Te Miento.
Martín se encontraba en el sillón discutiendo e insultando a la Michela. Mauro tendido en la cama tocándose en su habitación, con su culo grande y sus tetas churrascas. Menos mal que estaba el aire acondicionado, porque el ambiente estaba podrido y lo empeoraba un sahumerio de Maderas místicas. Y claro, el ambiente era místico, ya que estaban los padres de parrilla en su dormitorio así que nunca escuchaban lo que hablaban. Maycol, que era como disminuido mental, estaba con la cara en el televisor mirando programas grabados de Cacho Bochinche, se reía como loco y bailaba como Laura Martínez cantando El Pajarito Amarillo. Anibalito Lucas, que se encontraba con ellos empezó a vomitar algo violeta que no se sabía bien que era, parecían sanguijuelas o babosas. Fue entonces que Andrésito, tuvo uno de sus arranques de neurosis y comenzó a comer vidrio y hojas de gillettes picaditas. Giuliana, al presenciar estas escenas, comenzó a cantar “Como una loba” de Valeria Linch.
La situación se había tornado fea, un cuadro mas que feo mas bien macabro, malévolo y nauseabundo. Marcos, a pesar de tener esa crisis era un pan de dios y muy humano. Aunque era bastante inteligente, sabía mucho de la vida y usaba muy buenas tácticas para llevarse bien con la gente, además, nunca prestaba su Make Up. La pelea se debía en esta ocasión a que Martín le había contado en secreto a Giuliana cómo hacerse mujer en 6 meses en el Block Quirúrgico del Dr. TRUCOFASIL. Esta chico/a se enojó con Marcos y los problemas se les vinieron encima porque en ese momento entró la Gorda Avellenda, que había escuchado la conversación, comenzando a golpearles con las siliconas que había traído de Chile para su posterior operación
- Muy bien. -gritó- Sos una estúpida, si yo hablara lo que vos sos te tendrías que ir de esta casa. A lo que Giuliana contestó:
- ¿Y que tenés que decir de mi Gorda Zapalla y Pulgosa dueña de Tienda? ¿ No te acordás que hacías implantes de aceite de freno de avión con un aspirador de operación y con la misma cánula se lo hacías a los trabas de barrio Sur y Palermo y que murieron varios por asepsia y necrosis crónica y que caíste presa por asesinatos múltiples por mala profilaxis y que contrajiste SIDA en Cárcel Central? ... Lo siento. Se me escapó.
- ¿Se te escapó? - dijo retóricamente la Gorda Avellaneda, enfadada como para explotar.
- Eres un idiota. ¿Cómo te puedes olvidar de eso? Que terminaste fundando la legión de presas sidosas y hacían labor terapia tejiendo ropa para niños ciegos-huérfano refiriéndose a como se podía olvidar de lo que pasó.
- ¿Quieres que te "la meta"? ¿Quieres amármela?
Ni a Anibalito, Lucas ni a Martín les sorprendió lo que ella dijo. En realidad, ya se estaban acostumbrando / das a decirse cosas por el estilo. Claro que todo era siempre en broma coctelera, pero Marcos notó algo extraño en cuanto se lo dijo su amigo. No sabía explicarlo, pero Giuliana al ponerse la peluca rubia fluo le vino como una transformación casi dantesca donde comenzó a bailar, a cantar canciones de Rita Lee, principalmente la de “Lanza Perfume”, después comenzó a correr por la casa, comenzó a arrancar los cuadros que había en el comedor, a tirar el linóleo que estaba en el piso de la cocina. A su vez, la gorda Avellaneda quería que le dieran la pastilla que le subía las hormonas femeninas, pero como estaba con la Gonoloca era imposible calmarla. A su vez, los chicos, atemorizados porque sus padres vieran la situación, llamaron a los bomberos para que se pudiera despistar el relajo. A su vez, Anibalito agarro el cajón de las herramientas y saco las bengalas que tenía su padre para los casos de emergencia cuando salían en su yate al mar y comenzó a tirarlas contra la pared de la cocina, el comedor, la antesala.
La casa comenzó a arder en menos de lo que uno se pueda imaginar. Al rato llegan la policía, los bomberos, los paracaidistas negros, la fuerza de choque, la caminera, etc. Ese fue el final del melodrama de la pelea de la Giuliana y la gorda Avellaneda, porque como dice el refrán reunión de condominio siempre termina en cataclismo.

sábado, noviembre 05, 2005

BUSCANDO AL AMOR DE LA QUE TODO LO ENTIENDE

Como siempre me han gustado los hombres/mujeres y trans, he aprendido a ingeniármelas para llevarlos a mi propio terreno, o sea, la cama de agua, a la playa nudista, al cine porno, al baldío abandonado, y al parquecito. claro es que a los 20 años no tenía tantas ideas ingeniosas o disparatadas como las que me ha dado la experiencia, pero mi físico ayudaba bastante y la mente dance también.Era muy delgado, morocho, ojos verdes y de estatura más corta que lo normal, así que parecía más niño de lo que en realidad era que a esa edad no sabia si era hombre o mujer, y la mayoría pensaba que lo mío solían ser inocentadas.Como solía ir a todas las fiestas dance, ir a todos los baños públicos, mirar todo lo que podía contemplar y manosearme con mis visiones en la imaginación, en una de ellas fue cuando se me presentó la gran oportunidad de "comerme” un caramelito un poco Flaco pero que valía la pena tomar la iniciativa.
Bailaba muy amoroso y apasionado con su novia los lentos de AIR SU FLY que tocaban y se movía a su alrededor como un gallo que le hace el ruedo a una gallina en los tropicales y al caminar, se lucía ante ella como pavo real. Sólo le faltaba mostrarle la cola, la de delante, por supuesto..., porque la de atrás no era lo que eximia con toda propiedad.
No se que pasó, porque yo estaba "ocupado" mirando bultos en los servicios, pero cuando regresé ella le dijo: -Me voy con ONELIO que es mas caliente que vos y lo dejó allí sin qué hacer ni qué decir.Se ve que cuando atinó a salir a la calle, ella ya se había escapado.
Se quedó solo y medio tristón. Entonces aproveché para acercarme. El Flaco estaba medio bebido y drogado , tal vez por eso su novia se enfadó y se largó. Le dije: -invítame una bebida, caipiriña con pastillas ansiolíticas que es mejor y me levanta el animo.
-¿Que te crees mi novia o mi madre ? Me dijo-¿Cuál fue la que te metió los cuernos ella o Cornelio?-¡Shasss...! ya se le pasará..., no se va a aguantar mucho sin mí., aunque el la tiene mas grande, pero por lo que supe no llega al orgasmo porque tiene eyaculacion precoz y no se la chupa como yo hasta llegar al final.
Me reí, le tomé un poco el pelo y le acaricie la mejilla y cuando dijo: -me voy, como se lo había dicho la novia a él, me dispuse a acompañarlo. No puso objeción y nos fuimos pitando un porro, silbando y haciendo tonterías por toda la cuadra y cantábamos canciones de Marck Anthony y Gipsy king.Yo lo agarraba, a ratos, por la cintura y hacíamos como que dábamos pasos de baile mientras caminábamos y cantábamos, más desafinados que un borrachín pero alegres al fin por tan emocionante espacio de tiempo.En una de esas, apreté casi pellizcando su cintura, por encima de su camiseta verde con una gran imagen de INVENTIONS estampada en el pecho, un pecho mas alto que el otro, pero hermoso al fin.-¿Estás manoseándome?-Jajajajajaa, apuesto que te gustaría...-Si me manoseas la pollonesa me daría más gusto.-¡Bah...! esa es muy poca cosa para mí.-Con que muy poca cosa, ¿quieres vérmela, a ver si es poca cosa?
Los borrachos son niños en nuestras manos, pierden las inhibiciones y sólo se dejan llevar por sus impulsos más primitivos, pero que no son mas que animales acorralados a nuestros intereses personales.
-No eres capaz de sacártela aquí...-¿qué no?, dijo y acto seguido se tomó el amplio pantalón de cintura elastizada que ceñía tan bien su vientre estrecho de 27 delgados años y con slip-tanga y todo se los bajó hasta los muslos.
Yo quede sorprendido y en ese momento le dije vamos a mi apartamento, vivo aquí cerca del faro de Punta Carretas, mis padres se fueron de viaje al Chuy a un viaje de contrabando así que tenemos toda la noche para nosotros / as, yo se que cuando te acuestes conmigo mañana no serás la misma persona que fuiste hoy, mira que los hombres/mujeres cuando los dejan por otra persona suelen tener cambios que ni ellos mismos piensan que van a ser, sino el estudio de una doble personalidad que no les permite ver mas allá de sus propias limitaciones eróticas y emocionales.
Por eso quería contarles esta historia que no deja de asombrar al mas incrédulo de los humanos por su sencillez pero si por su osadía de mostrar una parte de nosotros / as mismos el algún momento de calentura febril de verano, que verano.